Capítulo 14: La felicidad es efímera
Capítulo 15: Hasta donde llega la maldad
Necesitaba verla. Con sólo tenerla cerca todas sus inseguridades se irían. Estaba seguro. Por suerte, al estar pensando continuamente en el camino, llegó a la casa de Alice sin ni siquiera darse cuenta. Esperó ver el coche de Claire pero recordó que por el choque con Taemin se lo estaban arreglando. Se adentró en el jardín trasero para no tener que molestar a la servidumbre. Seguramente Young Mi estuviera por ahí cerca y le abriría.
Comenzó a preocuparse pasados unos minutos. Aquello no era normal, por lo que decidió ir por la entrada delantera y preguntar.
-Las señoritas no están en casa, disculpe- Vio una melena castaña a través de la pantalla del telefonillo. Parecía ser la chica de la limpieza.
-¿Puede decirles cuando vengan que he estado aquí?
-Sí, por supuesto
-Gracias
Se despeinó con sus manos en signo de frustración. Al escuchar el sonido al colgar no pudo ignorar aquella sensación. Esa angustia cuando algo te dice que va a pasar algo malo. No lo pensó, se dejó guiar por esa intuición y merodeó por las calles colindantes a esa.
Estaba por rendirse cuando escuchó un grito. Sabía perfectamente quien era su portador. Sin más corrió hasta donde provenía para encontrarse con la peor escena que podría haber presenciado. Por un momento sintió alivio al ver a su querida Alice sana y salva pero algo iba mal. Muy mal...
-¡Ayuda!- Volvió a gritar Young Mi. Esta y Sung Hye estaban de rodillas, la primera sujetando un cuerpo. ¡Dios mío! Aquello no estaba ocurriendo. En uno de sus giros de cabeza en busca de ayuda, Claire cruzó la mirada con la de Jonghyun. -¡Jonghyun! ¡Jonghyun por favor, ayuda!
-¿Qué...- No pudo continuar su pregunta cuando al llegar a ella descubrió de quien se trataba ese cuerpo inerte. Taemin estaba inconsciente con su cabeza y parte de su espalda en el regazo de la muchacha. A la altura del abdomen, se veía un corte profundo por el que brotaba abundante sangre, Jong dedujo que había sido herido con un arma blanca. -Esto... Esto no puede estar pasando...- Se hubiera escuchado su susurro si los sollozos de Young Mi no estuviesen inundando la calle. En un momento de lucidez se dispuso a actuar rápidamente. Por el bien de su amigo. Se arrodilló enfrente de la muchacha y esta lo miró un tanto aturdida hasta que entrevió sus intenciones al quitarse la chaqueta para ofrecérsela. -Young Mi, mírame- Ella obedeció. Jong puso la prenda hecha nudo sobre la herida y presionó, entonces guió las manos de la joven para que siguiera ejerciendo fuerza como lo había hecho él. -Llamaré a la ambulancia, mientras aprieta la herida fuerte y no aflojes ni un momento ¿Está bien?- Sorprendentemente Claire parecía bastante receptiva en esos momentos, le dedicó una sonrisa tranquilizadora mientras sacaba el móvil del bolsillo de su pantalón. Agradeció la efectividad del servicio sanitario cuando le tomaron los datos para ir a por su amigo, esperaba que también fuera eficaz en la rapidez al llegar al lugar.
Se giró hacia ellos, no sin antes dar un tierno beso en la frente de Sung Hye para tranquilizarla y seguido ayudar a Young Mi presionando la herida de Taemin.
---
-Ha sido culpa mía...
-No, Claire. No digas eso ¿Ok? El único culpable es el maldito que le ha hecho esto a Taemin- Insistió Jonghyun por enésima vez desde que llegaron al hospital. Tenía abrazada a Alice mientras que con la otra mano intentaba calmar a Young Mi sobando su hombro. Esta daba vueltas sobre si misma culpándose del incidente. -Cálmate. A ver... Cuéntame que ha ocurrido desde el principio- Quizás así podría distraerla de sus incesantes nervios. No esperó que diera resultado hasta que la vio sentarse enfrente de ellos y comenzar a hablar.
-Ese tipo venía a por nosotras. Si me hubiera pillado a mí sola no habría pasado esto, pero con Alice era mejor no correr riesgos, así que decidí que era mejor correr...
-¿Le has visto la cara?- Una ligera sospecha punzaba el corazón de Jonghyun. En lo más profundo, en su interior, deseaba que sólo fuera eso, una simple sospecha...
-No. Llevaba uno de esos... ¡Pasamontañas! ¡Eso! Maldito cobarde...
-Entonces ¿Qué más ha pasado?
-Entonces ese mocoso se nos ha cruzado y yo como una estúpida he dejado que asumiera el mando. Cuando he querido machacar a ese cabrón ha sacado la navaja y Taemin se ha interpuesto... Taemin me ha salvado la vida- La última frase la dijo como si ella misma se diera cuenta, ahora, de lo que eso significaba. Jonghyun temió la reacción al verla levantarse completamente ofuscada. -Mierda. Me ha salvado la vida. Sólo por hacer el tonto, si no lo hubiera hecho tal vez yo habría esquivado el navajazo ¡Maldición!
-¡Ya basta! ¡Deja de torturarte Claire!- Se pronunció Alice con decisión. La primera vez, en todo ese mal trago, que reflejaba fuerza y seguridad ante los demás. Parecía estar en shock hasta ahora pero se equivocaban. Intentaba esperar noticias del muchacho manteniendo la calma. Justamente siempre fue Young Mi la que tenía por costumbre tomar esa postura, tranquila y paciente, en situaciones grotescas como esa. Estaba realmente afectada por ese joven y su amiga comenzaba a ver el porqué. Quizás ella no se daba cuenta de sus propios sentimientos pero Sung Hye sabía desde hace días hacía quien se inclinaban.
-Es que...
-¡Ya, Claire!- Jonghyun observaba en silencio la escena. Alice sabía más que nadie como tratar a su amiga y, aunque tuviera unas ganas horribles por ayudar, decidió quedarse al margen. Tenía entendido que se conocían de años así que, quién mejor que Sung Hye para calmar a Young Mi. Sonrió de lado al verlas abrazadas. Arreglado eso, sólo tocaba esperar noticias de Taemin. Estas no se hicieron esperar ya que un cirujano salió del quirófano quitándose los guantes y yendo hacia ellos.
-¿Y bien doctor?- Preguntó el muchacho pegando un respingo de la silla en la que estaba. Young Mi se acercó temerosa agarrando fuertemente el brazo de su amiga que en vez de guiarla, lo hacía Alice.
-Afortunadamente la herida no ha alcanzado órganos vitales y se repondrá con unas semanas en el hospital. Lo único que les pido es declaren ante la policía todo lo que hayan presenciado. Debemos presentar un informe. Lo comprenden ¿Verdad?- Explicó el médico dirigiéndose a todos ellos, en especial a Young Mi. Se le notaba ahora mucho más calmada pero entre ellos tres ganaba en tensión. La información recién adquirida los dejó satisfechos, tanto que se fundieron en un abrazo amistoso.
-Ay dios. Menos mal, menos mal- Exclamó Young Mi sonriendo sinceramente.
---
El joven llegó a su casa. No atendió mucho si sus progenitores estaban ahí o no, para irse directamente a su habitación, pero la voz de su padre detrás de él lo hizo retroceder.
-¡Minho! ¿Qué tal el día?- Cuestionó algo curioso.
-Mal papá... Al parecer alguien nos quiere joder y lo está consiguiendo- Se dio por vencido. Al ver como su padre le pasaba la mano por el cuello invitándolo a que se sentara con él, en el sofá del salón, no puso resistencia. Aunque sabía que no podría hacer nada para solucionar el problema, el consuelo de su padre ya era algo.
-¿De qué se trata?
-Jonghyun salió disparado el otro día. Supuestamente sabía quién nos estaba haciendo la puñeta pero ayer nos llamó para decirnos que dejaba el grupo- Dicho esto se dejó caer, con desgana, sobre el respaldo.
-¿No será que lo están amenazando?
-No lo sé aunque es lo más probable...
-Mmm quizás pueda ayudarte hijo- Sus palabras hicieron que Minho se reincorporara de sopetón, dando un bote ante la posible ayuda de su padre.
-¿En serio? ¿Cómo?
-Si me dices en qué locales tocáis quizás... Pueda mover algunos hilos- Su hijo sonrió alegremente. Siempre había sido un manager conocido y altamente recomendado. Cruzaba una época bastante mala pero sus habilidades aún seguían en auge. O eso pensaba él.
-Gracias papá- Sin más se levantó para irse directamente a su cuarto pero casi choca con su madre al subir las escaleras. La agarró evitando que tropezara y cayera por ellas.
-¡Oh hijo! ¡Que susto por dios! ¿Dónde has estado todo el día?- Preguntó la mujer al sentirse a salvo.
-Por ahí, con los del grupo... Llámame cuando esté la cena ¿Vale?- No le dejó tiempo de responder cuando su madre lo vio desaparecer por el pasillo superior. Sonrió igualmente yendo hacia el salón para recibir a su marido.
---
-Ya pueden pasar a verlo- La enfermera les indicaba con sus brazos la habitación de Taemin, justo por donde había salido segundos antes.
-Gracias- Dijo levemente Young Mi. Cuando entraron vieron a un Taemin somnoliento. Desde que lo conocía, Jonghyun siempre lo había tenido por un mocoso hiperactivo. Seguramente una persona normal en su estado estaría roncando profundamente en sus siete sueños, mientras que él ya comenzaba a despertar de la anestesia. Admiraba su energía pero en estas cuestiones lo lamentaría. Aquella herida debía doler mucho como para sufrirla en vivo.
Dejó de mirarlo para ofrecerle asiento a Alice. Esta agarró su mano en señal de apoyo, nunca se acostumbraría a su tacto sin que se le electrizara la piel, estaba completamente seguro. Incluso en una situación como esa desearía besarla desenfrenadamente. Pero optó por rozarle el dorso de la mano con sus labios. Un gesto delicado y elegante que jamás pensó hacerle a una mujer. Siempre tan alocado en esas cuestiones que se había olvidado ser caballeroso en ciertas ocasiones ¿Sería eso parte de su problema? La voz de Taemin lo aisló de sus pensamientos.
-¿Chicos?- Su tono era apagado, como si aún no hubiera recuperado la conciencia del todo. Se reincorporó trabajosamente sobre la cama.
-Taemin ¿Cómo te encuentras?- Young Mi ya estaba sentada a un lado de la cama, le ayudó con la almohada antes de posar su mano en la del muchacho ¿Era consciente de lo que estaba haciendo? Lo más seguro es que no. Los ojos de Taemin fueron directos a ese punto y ahí fue cuando la muchacha intentó remediar su atrevimiento. La propia extremidad de Taemin se lo impidió. Claire tuvo el impulso de querer golpearlo y ganar esa batalla pero la situación y lo que su interior le pedía es que lo dejara estar.
-Ahora perfectamente- Entrelazó los dedos con los de la muchacha que se ponía colorada por momentos. Sonrió triunfante al ver el efecto y como podía sacar provecho de lo sucedido.
-Hijo de...- Se vio interrumpida por lo último que se esperaba. Los labios de Taemin. Estaba vez no jugó con ellos, fue un desesperante pico que hizo que Young Mi deseara abrirle la herida de nuevo. Jonghyun carraspeó retrocediendo hasta llegar con Alice evitando soltar una risilla tonta. -¿Quién te crees...
-Me lo debes- Le susurró.
-¿Qué? Tú te abalanzaste ¡Imbécil!- Por fin consiguió soltarse del agarre.
-No me refiero a eso... Te he salvado la vida porque he querido. Me refiero a que ese tipo no se llevó ni el derechazo ni esa superpatada tuya que yo recibí. Así que... Esto es tu culpa- Iba a replicar cuando entendió que tenía razón. Se había acobardado y él lo estaba pagando. Maldición.
-Taemin ¿Pudiste verle algún gesto familiar al tipo? ¿O algo que te dijera en esos momentos?- Preguntó Jonghyun minutos después.
-Sospechas de...- “Tu padre” terminó mentalmente. Uff por poco mete la pata. Cerró los ojos al ver que casi se descubre y con ello a Jonghyun. Este lo miró también consternado por lo que había estado a punto de desvelar. Young Mi los observó, debían inventar algo y rápido.
-Sospecho de que es un encargo- Dijo Jong. Taemin suspiró aliviado y sonrió como si nada a Claire.
-¿Un encargo?- Comentó curiosa Alice, volviendo a entrar en la conversación.
-¿Tenéis algún enemigo al que temer?- Jonghyun sólo preguntó para desviar la atención, lo que no adivinó es que la mente de la muchacha se trasladara al lugar y el momento más espantoso de su vida. ¿Podría ser que ese maldito desgraciado la estuviera buscando otra vez? ¡No! Eso no podía ser posible ¿O sí? Todo su cuerpo tembló torturándola.
Capítulo 16: Tempestad inevitable

No puedo verte by Laura Ramírez Patarro is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported License.
Permissions beyond the scope of this license may be available at https://www.facebook.com/LaCulturaKPopYJPop.
No hay comentarios:
Publicar un comentario